Hace diez años pasé dos días rodando en el cementerio de neumáticos de Seseña. Fue para la película Bienvenido a casa. Harto de atravesar por la carretera y apreciar ese enorme vertedero, me pareció un lugar digno de ser filmado. Fue complicado lograr el permiso, pero entonces aún quedaba algún peón patrullando por allá. Las dos jornadas fueron infernales, porque si estos días es tóxica la nube negra, entonces lo era el polvo y la atmósfera del lugar. Ahora que los neumáticos han ardido, en lo que parece un último retorcimiento del desatino, muchos se hacen preguntas indignadas con toda la razón, pero conviene advertir que nuestro país tiene este tipo de monumentos por doquier. Es lo que nadie quiere entender. Que somos lo bueno y lo malo. Esto los patriotas lo tratan de disimular, diciendo que España es estupenda, y menudo jamón, y que si no te gusta te vayas a vivir a Francia. Cosa que dicen para sacudirse de cualquier crítica hacia las estructuras nacionales y de paso seguir llevándose el dinero a Andorra y Panamá, donde lo cuidan mejor que aquí.
Este vertedero de neumáticos era chapapote solidificado en la costa de Madrid. Era un poco nuestro Prestige, que también es una enseña nacional. Y es que España es el país de la Pedrera y la Alhambra, pero también de las rotondas imaginativas y el arte urbano patrocinado por las autoridades oligofrénicas de Navalcarnero y Castellón. La línea de costa española tiene suficientes hoteles Algarrobico y delirios arquitectónicos como para llenar una enciclopedia del disparate. La acción de la justicia y la agilidad de las autoridades casi siempre afectan a los pequeños comercios y a las familias desahuciadas, pero no saben lidiar con empresarios tercos ni equipos de abogados mañosos. Y luego está el funcionamiento tradicional del amiguismo y el enredo, los sobres y la mordida. Para acabar de trampear el asunto, lo habitual es que los partidos políticos estén enfrentados, como los municipios, las comunidades autónomas y hasta los ministerios y departamentos entre ellos, por lo que no es raro que Industria, Turismo o Infraestructuras anden a la gresca con Medio Ambiente o Agricultura y Pesca.
Las ruedas de automóvil no llegan al vertedero porque lluevan del cielo, sino porque carecemos de plan para reciclarlas ni para reducir el consumo ni para racionalizar nuestro modo de vivir. El coche es nuestra industria más gozosa y festejada, pero poco importan sus desperdicios. Tampoco consideramos la ecología y el respeto al medio ambiente ninguna prioridad nacional. Todo eso nos da igual, salvo cuando la nube negra se planta en tu ventana. Entonces...
David Trueba. El país. 17/V/2016
11 comentarios:
Nos encontramos ante un artículo de opinión escrito por David Trueba para el periódico El País. En estos tres párrafos podemos apreciar ccomo Trueba habla sobre un tema muy reciente que ha tenido mucha repercusión en los medios: el incendio del cementerio de neumáticos de Seseña.
Trueba hace una crítica a la sociedad española en general y a su comportamiento frente al medioambiente, como consecuencia de sucesos como este último incendio que ha producido una gran nube tóxica sobre la localidad de Seseña.
Hechos como este, suceden todos los días en el mundo ya sea a través de incendios de neumáticos, vertida de residuos en el mar o emisión de otros gases nocivos de las fábricas. Esto hace que se acelere el fin de vida de nuestra tierra, que poco a poco vemos como va muriendo debido a las consecuencias de estas acciones que aunque puede que las produzcamos inconscientemente, no hacemos nada para evitarlo.
Cada vez son mas personas las que se conciencian sobre este turbio tema y se introducen a fondo en proyectos que promuevan la mejora del medioambiente o simplemente reciclando desde sus casas, al menos ya es un avance, pero que no es suficiente comparado con la velocidad a la que contaminamos.
Trueba tambieén critica otro de los temas que tanto se usan para referirse a España...la corrupción.
El tema de la contaminación y la corrupción puede ir muy ligados. Por ejemplo cuando una empresa paga el silencio de un inspector de seguridad residual debido a que esta incumpliendo la normativa legal o cuando el alcalde de un municipio destina los fondos (que deberían usarse para reciclar) en la construcción de su chalet y tira todos los vertidos a cualquier descampado que no llame mucho la atención.
Relacionando las dos críticas podemos decir que al igual que el medioambiete cada vez se va contaminando más lo mismo pasa con nuestros valores.
El texto a comentar es un texto periodístico de opinión escrito por el director de cine David Trueba para el diario El país el 17 de mayo de 2016. El texto, que es expositivo, manifiesta la critica del autor acerca de los problemas medioambientales en España y su gestión, tanto política como social. Hace uso de un registro formal y de un nivel sociolingüisto apto para todos los lectores.
Seseña, ese pueblo de Toledo fronterizo con la Comunidad de Madrid, que ya estuvo en boca de todos cuando al Pocero se le ocurrió crear una ciudad de la nada, y sobre nada. Ahora vuelve a ocupar espacios en todos los telediarios por el incendio de un vertedero ilegal de neumáticos que su mayoría se encuentra en dicho municipio. Lo que en un principio parecía una noticia simple, que servia para rellenar un hueco mientras hablaban de la precampaña- como si no hubiéramos tenido suficiente- o de las esperanzas del Real Madrid en ganar la liga, se ha estado convirtiendo en una noticia a nivel estatal. Podríamos pensar que ese auge de la noticia se deba a la preocupación de preservar el medio ambiente, pero en el verano del año pasado ocurrió otro incidente de las mismas características en León, yo no recuerdo tanto bombo y estoy seguro de que habrá gente de la misma provincia que desconozca el hecho. Se ve que en este país si quieres que algo suene tiene que irte a Madrid o afectar a sus ciudadanos, si el incendio hubiera ocurrido a 400km de la capital y no a 40km; otro gallo cantaría.
Aun así, no es plato de buen gusto tener un incendio en tu casa, y a diferencia del autor, que escribe que nadie movió un dedo para evitarlo, los habitantes de Seseña denunciaron la situación, que el alcalde se lo hizo llegar a saber a Castilla-La Mancha en varias ocasiones, la última, diez días antes del incidente. Es verdad que a esos iluminados que toman las decisiones por nosotros,les importan tanto el medio ambiente como a nosotros nos importa la reproducción del atún, pero el pueblo español está a la cabeza en reciclaje, según datos de la Unión Europea del pasado año, y superar a países con tanta fama de ecológicos como Dinamarca o Luxemburgo es motivo de orgullo y celebración. No obstante, siguen existiendo personas que incendian neumáticos o que consideran que Doñana es un pantano molesto.
Lo que tenemos que hacer ahora los ciudadanos una vez que haya acabado el fuego, es mirar a nuestro alrededor si existen otros puntos de riesgo y avisar al gobierno, que seguramente actúe, ya que tiene el miedo en el cuerpo de que vuelva a ocurrir. A continuación, evitar que esto vuelva a suceder cuando la economía se recupere; ya no estamos en el tiempo del boom donde todo valía, donde mirar a otro lado, justificándolo con el progreso, no sirve para nada. Porque cuando las vacas flacas vuelvan por nuestros pastos, los empresarios emigraran con nuestro dinero y nos volveremos a ver igual. Lo ideal sería potenciar un modelo sostenible con el medio ambiente, tanto en ciudad como en el campo, cueste lo que cueste, porque la mierda que soltamos a la tierra, la tierra nos la devuelve.
PARTE 1
David Trueba, escritor, periodista y guionista, nos plantea un articulo en el periódico El País que consta de tres párrafos con sendos temas. El primero plantea que España posee cosas buenas y malas aunque los "patriotas" escondan lo ultimo, en el segundo continua el tema del primero ampliando con ejemplos o más bien desastres de nuestro país y la mala gestión de los políticos.
En el tercero plasma su preocupación por la falta de un plan de reciclaje para ese problema de forma espontánea y rompiendo con el curso del tema anterior.
Con un lenguaje informal pero sin ser vulgar expresa una idea que puede ser recogida por todos los lectores, excepto por algún "patriota" dañado por sus palabras.
El señor Trueba elige un tema muy actual y sencillo de criticar, empieza con una vivencia personal para acercar al lector a su postura y dejarlo en una imposibilidad de refutar su idea como hacen muchos escritores. Tras esto cae en la critica fácil del político y la corrupción ,y todos los casos que tan abrumadores son para la población, que pienso, es inútil, porque si no hemos aprendido ha estas alturas habiendo pasado 40 años de "democracia" entonces no aprenderemos jamas. Acaba embarrando a los ministerios que deberían encargarse del problema y termina quejándose de la inexistencia de un plan de actuación ante semejante suceso, que vote a algún partido ecologista digo yo.
Sinceramente veo este articulo vació, pues aunque la decadencia española es obvia, cansa que nos la echen a la cara, no solo porque no hagamos nada, sino que esa cadena intencionada de emisiones de problemas cansa a la vez que adormece al espectador o lector, haciéndolo “insensible” ante los sucesos que nos gotean día a día.
Creo que aquí el tema político, aunque importante a la hora de la prevención, es vacuo, pues podríamos quejarnos y quejarnos de los políticos, tiremos la piedra y escondamos la mano. Es muy fácil la critica ajena pero muy difícil la propia. El proceso de apertura de España al mundo en el 76 era un “boom” de esa clase media inconformista que no veía su vida con simpleza, sino con coches, lavadoras y todo tipo de lujos, ahora que Franco no puede detenernos, ¿quien puede detenernos? ¿El mercado? ¿Una crisis estructural?
Desde la revolución industrial hace mas de 300 años se ha ido desarrollando una característica propia de toda sociedad capitalista “desarrollada”, el consumismo masivo y destructivo. Todos preferimos el lujo a una vida estoica, pero nadie piensa en la naturaleza hasta que se produce un cambio ambiental que haga peligrar nuestro “desarrollo” tan enorme...
Nadie piensa en el cerdo muerto, y me incluyo en esto, cuando comemos carne, ni en todas las personas que han sido explotadas en África para sacar los minerales de nuestro “chulisimo” smartphone, dispuestos el año siguiente a comprar el ultimo grito de la tecnología. Trueba intenta darnos una lección moral apoyándose en la corrupción y en la mala situación de la naturaleza, agravada por la quema de neumáticos, pero todos, en mayor o menor medida formamos parte de las estructuras o los esquemas sociales.
PARTE 2
Es innegable que desde la política ha habido una inexistente acción por la naturaleza, la desertificación en España crece por años, espero que Trueba también se preocupe por eso y no solo por la ultima noticia que pueda llamar la atención de alguien para que otro gane mas dinero. La realidad es peor, porque no solo no hay acción política si no que la acción ciudadana ante esto ha sido mínima y los partidos tradicionales han seguido aplicando el régimen neo-liberal – máximo beneficio sea lo que sea. La quema de bosque intencionada por la Ley de Montes (2003) que permite la compra o edificación de aquellas tierras que hayan sido “quemadas naturalmente” también es algo de lo que nadie mas que los ecologistas o los progresistas han denunciado, mientras PP y PSOE la han mantenido y se han aprovechado.
Pero que mas da, total preferimos la máxima cantidad de todo aquello que podamos acumular para cansarnos al segundo y anhelar lo siguiente, eso no solo es el consumismo,también es infelicidad social para todo aquel que nazca en el seno de esta sociedad.
Es fácil ir contra el PP por sus construcciones tan exuberantes como absurdas, pero nadie se queja ni le planta una moción de censura por semejante gasto no solo tan innecesario sino criminal, pues va en contra de “su” amado sistema que tan genial es. Que problema son aquellos que quieren identificar a los culpables de estas estructuras, que malos son aquellos que prefieren el estoicismo al lujo masivo, que problema para la casta. Es fácil quejarse, muy fácil, pero todos y cada uno tenemos un deber, porque no solo tenemos derecho, y no es una vez cada cuatro años, no, es todos los días, aplaudiendo o criticando las acciones del gobierno, y castigarlo o no en las urnas, porque creo que es obvio que aquel que critica y se mantiene inmóvil hace una defensa de la hipocresía.
Necesitamos una acción conjunta de la ciudadanía y la política por la naturaleza, y en la manos del capitalismo neo-liberal eso es imposible, necesitamos una reforma completa del ideario colectivo, un planteamiento mas estoico, mas ecológico (que no solo es separar basura sino,no tirarla por ahí), mas humano y menos numérico. No debemos dejarnos llevar por la noticia del día, sino tener memoria de lo que sucede todos los días, pues no solo tenemos vertederos llenos de tóxicos en España, sino que nos estamos quedando “sin verde”, sin montañas, sin bosques, y no solo eso sino que todo el mundo regido por la misma ideología y filosofía ha caído en la decadencia natural y social.
Esta demostrado que la mayoría de ricos son infelices, quizás debieran cambiar su filosofía, quizás en vez de caer en la critica fácil y el olvido deberíamos optar por la auto critica y la memoria, “sin miedo y con memoria” deberíamos replantear este sistema desde las raíces, porque un parche no soluciona el calentamiento global ni el deshielo, que por cierto creamos todos y todas. La solución es fácil, lo difícil son las personas.
Nos encontramos ante un artículo escrito por David Trueba el 17 de Mayo en el periódico El País, y trata un tema de actualidad como es el incendio del cementerio de neumáticos de Seseña .
Ante tal desastre para el medio ambiente, David Trueba realiza una crítica no solo al hecho en sí, sino también a una sociedad que no quiere ver el lado más oscuro de nuestro país.
Iniciando por un análisis de la situación, el pasado 14 de Mayo, durante la madrugada se inició el incendio en el cementerio de neumáticos del municipio de Seseña, horas más tarde el gobierno de Castilla la Mancha, indicaba el peligro ambiental que tenia dicho incendio pero advertía de la no peligrosidad a nivel de salud; no soy experto en salud pero algo me hace suponer que una nube toxica de un incendio de neumáticos no es precisamente saludable por lo que me queda una segunda opción que es la que presupongo que pasó. El gobierno autonómico buscó no crear una alarma social, lo cual me parece vergonzoso; está bien no dar una noticia con un titular alarmante, pero el hecho de no informar sobre la posible peligrosidad del asunto es un error muy grave.
Por otro lado, como el propio David Trueba escribe en su artículo "somos lo bueno y lo malo". Si bien es cierto que somos lo bueno y lo malo, debemos de evitar todo aquello que este mal hecho ya que lo aquello que esta mal hecho no se va a solucionar por si mismo, sino que debemos intervenir para que se haga de otra manera.
Debemos erradicar la corrupción, la falta de independencia de los poderes administrativo, legislativo y judicial; el constante incumplimiento de la constitución y los derechos humanos, incrementar la investigación y dotar de medios a las investigaciones sobre los paraísos fiscales, etc.
Está bien recordar que somos uno de los países con mejor y más saludable gastronomía a nivel mundial, que tenemos una gran variedad de lugares que visitar sin tener nada que envidiar a lugares en el extranjero, pero esto no quita que seamos a la vez un país en el que la burbuja inmobiliaria ha producido un grave descontrol en la edificación, tenemos ejemplos de hoteles ilegales en multitud de puntos de España; sobre el tema, el propio ex-ministro de Industria y turismo Soria estuvo veraneando en un hotel ilegal de la isla de Lanzarote durante los últimos cuatro años.
Los seres humanos no podemos ser perfectos ni hacer las cosas de una manera perfecta, pero sí podemos tratar de nuestros defectos disminuirlos y nuestras virtudes agrandarlas.
En definitiva, vivimos en un país en el que algunos solo quieren ver el lado bonito de las cosas, que solo quieren ver el color rosa en toda una gama de colores claros y oscuros. El incendio de Seseña está controlado, veremos que tal el siguiente.
ORGANIZACIÓN IDEAS
El texto propuesto, estructurado en tres párrafos, puede dividirse en cuatro partes.
La primera abarcaría desde la línea 1 hasta la 5 (… la atmósfera del lugar). En ella, el cineasta nos cuenta su experiencia en aquel lugar que utilizó para rodar una secuencia de una de sus películas, aludiéndonos a que por aquel entonces, le costó obtener un permiso para poder rodar allí porque la zona estaba algo vigilada. Ya, en aquella época, resultaba complicado respirar.
Aprovecha esta situación personal para dar paso al presente, pues ahora que el vertedero se ha incendiado, nos echamos las manos a la cabeza indignados. Aquí, comienza la segunda parte que llega hasta el final del primer párrafo (línea 12); en la que el autor intentar hacernos ver que Seseña no es el único caso de esta barbarie y que, aunque no queramos ver la realidad, España, al igual que una moneda, tiene dos caras, la mala y la buena.
A continuación, en la tercera parte (segundo párrafo completo), muestra ejemplos de lo bueno y lo malo de nuestro país, trasladándolo también a la justicia, que no suele beneficiar a los más desfavorecidos; a la política, con sus particulares chanchullos; y al gobierno de las distintas administraciones, que en vez de plantear soluciones se enredan en trifulcas.
El último párrafo correspondería a la cuarta parte, en la que, a modo de conclusión el autor nos hace ver que somos nosotros mismos los causantes de estos problemas medioambientales debido a nuestra dejadez. Los hubiéramos podido solucionar, si hubiésemos tenido un plan de conservación del medio ambiente. Pero claro, la industria automovilística ha primado sobre éste y nos hemos alarmado cuándo nos hemos topado de bruces con este contaminante problema.
COMENTARIO CRÍTICO
El escritor, periodista, director de cine, guionista y actor madrileño, David Trueba, publicó este artículo argumentativo el pasado 17 de mayo en el periódico El país; en el que utiliza un registro formal y un nivel sociolingüístico comprensible para cualquier lector.
El autor realiza una crítica sobre los problemas medioambientales que se dan España y la reacción de la sociedad y la política ante éstos; escogiendo un tema de actualidad como lo es el incendio, presuntamente provocado, del cementerio de neumáticos de Seseña que tanto revuelo está causando.
Por una parte, no entiendo que no haya habido más control y vigilancia en esta zona, ya que se podría haber evitado o, al menos, haber controlado la expansión de dicho incidente.
Por otra, parece mentira que las autoridades competentes, desde el Ayuntamiento de la localidad hasta el gobierno autonómico de Castilla-La Mancha e incluso el Ministerio de Medio Ambiente, hayan tolerado la existencia de dicho vertedero durante más de una década y media. Además esto ha dado lugar a que salgan a la luz otros casos similares al de Seseña, como lo son los vertederos de León y Fuerteventura.
¿Cómo no se ha hecho nada antes? ¿Cómo se han acumulado durante años toneladas y toneladas de neumáticos sin que nadie fuese capaz de hacer nada?
Sin duda nos encontramos ante otro de los problemas medioambientales que amenazan a nuestro país y a nuestro planeta; no nos olvidemos de esas nubes tóxicas que hace poco andaban por Madrid y Barcelona, ni del calentamiento global o la descongelación de los glaciares entre otros. Y, aun así, sigue pareciendo que no queremos enterarnos que somos nosotros los causantes y que somos nosotros los que deberíamos aportar soluciones para erradicarlos. No somos conscientes de las graves consecuencias del deterioro medioambiental. Como no pongamos límites poco a poco la destrucción de nuestro planeta será mayor. Debemos considerar prioritario el cuidado del medio ambiente como otro aspecto importante de la vida social.
Deberíamos fomentar más la "cultura" medioambiental por ejemplo en las aulas, enseñando a los niños desde pequeños cómo deben reciclar, usar adecuadamente los contenedores de colores, usar más los transportes públicos; es más, si se destinasen más ingresos a tratar de solucionar este problema, se podrían crear más plantas de eliminación de residuos o desaladoras de agua e incluso aprovechar más el sol y el aire para generar energía limpia con la creación de más plantas solares y eólicas. Pero preferimos la comodidad de la "ignorancia".
Abraham Vicedo Sandoval 2ºC
Segunda parte:
Nos encontramos ante un texto periodístico, concretamente con un artículo de opinión, escrito por el director de cine madrileño David Trueba, para el periódico de tirada nacional El país, el pasado 17 de mayo. En él nos habla sobre el incendio en el cementerio de neumáticos de Seseña.
El autor realiza una crítica sobre lo ocurrido, poniendo como ejemplos otras catástrofes ocurridas en el país y criticando las estructuras internas además de la falta de actuación de la sociedad.
Actualmente estamos acostumbrados y más en los últimos tiempos con las redes sociales, a que la sociedad tenga más poder de movilización, lo vemos día a día en informativos, twitter, Facebook, etc.. pero tiene que pasar cualquier cosa para que esto pase.
Es el caso de lo ocurrido en el último incidente medioambiental que ha pasado, el del cementerio de neumáticos de Seseña. Solo ha hecho falta que a los vecinos colindantes les afecte en primera persona para que tengan el amago de quejarse y poner remedio, además de reivindicar la falta de actuación de los líderes que manejan los asuntos medioambientales en España, pero ¿qué pasa si esto no llega a ocurrir? Probablemente todo seguiría igual, los vecinos haciendo sus vidas normales y aunque contamine igual y el cementerio sea toxico, como el humo no le llega a su casa, aquí nada ocurre.
Hace falta actuación ciudadana ante estas cosas y sobre todo del gobierno, estamos ya familiarizados con temas de importancia colosal debido a sus consecuencias, como los casos que mencionan David Trueba en su articulo, el del chapapote del famoso Prestige, y aun así todavía no hay un plan preventivo que ayude a que todo esto no ocurra. Pero claro estamos están mas ocupados en asuntos que les atañe a ellos mismo y no al país y los ciudadanos, por los que gracias a sus votos ocupan sus puestos.
Necesitamos tener mas voz y actuar nos afecte o no, a pesar de que poco a poco se consigue estamos todavía luchando por esto y porque lo que queremos y deseamos para la mejora de todos se cumpla de una vez por toda.
Hoy ha sido Seseña, en el pasado fue Galicia, ¿Qué será lo próximo? ¿habrá próxima vez? No lo sabemos mientras tantos estamos esperando y encerrados en casa hasta que el problema nos llegue en primera persona y tengamos la fortuna de ser escuchados.
ORGANIZACIÓN DE LA IDEAS
En cuanto a la organización externa, esta columna cuenta con veintinueve líneas divididas en tres párrafos.
En cuanto a la organización interna, podemos dividir el texto en tres partes: la primera parte abarca de la línea 1 a la 8, y en ella el autor habla del rodaje que realizó en el cementerio de neumáticos de Seseña y las condiciones en las que trabajó, además de plantearnos un punto importante para el desarrollo del texto: el reciente incendio no es el único problema de este tipo con el que cuenta España.
En la segunda parte, que abarca de la línea 8 a la 24, se argumenta la idea mencionada anteriormente: se compara al vertedero con el Prestige, se mencionan un par de monumentos emblemáticos y posteriormente se ejerce una crítica contra las administraciones, gobiernos y autoridades; su poca capacidad de actuación salvo cuando se trata de casos que afectan a gente que no tiene el suficiente dinero como para permitirse juicios larguísimos que finalizarán en “declarado inocente”.
Finalmente, en la tercera parte, que abarca de la línea 25 a la 29, se hace una segunda crítica: la de nuestra poca capacidad de acción salvo cuando el problema nos afecta y lo tenemos delante de nosotros.
Fabiola Romero 2º. BACH. B
(PARTE 1)
El texto a comentar es un texto periodístico de opinión escrito por el periodista y guionista español David Trueba para el diario El país, el 17 de mayo de 2016. Aquí, el método discursivo dominante es el expositivo, pues el autor manifiesta sus ideas críticas acerca de los problemas medioambientales en España y su forma de gestionarlos -refiriéndose tanto al ámbito político como social- poniendo como ejemplo el incendio del vertedero de neumáticos de Seseña. Hace uso de un registro formal y de un nivel sociolingüístico adaptado a todo tipo de lectores.
Sucesos como el incendio de Seseña nos hace, cada vez más, darnos cuenta de la estupenda y magnífica gestión que realiza el gobierno de nuestro país ante problemas de todo tipo.
Si de verdad los propios ciudadanos tuviéramos el gran interés de llevar una vida digna, no seríamos unos cobardes y tendríamos el valor de encararnos ante la “justicia”. Desafortunadamente, no es así. Preferimos evadirnos de la realidad y entrar en nuestro mundo ficticio, con el fin de no sufrir este fraude; por ejemplo, llegando al extremo de suicidarnos y, así, alcanzar una vida mejor.
¿Cuándo va a acabar esta situación? Es la pregunta.
Pienso que parte de la culpa no es solo de los políticos, sino de nosotros que siempre elegimos a los mimos partidos políticos que años atrás nos han acabado engañando o llevándonos a la crisis. Somos unos ilusos.
Tal como opina el autor, estos políticos solo saben guiarse por los intereses y no por el bien de sus ciudadanos. La codicia de poder, hace que pierdan la cabeza y utilicen el dinero para sus coches de lujos o sus mansiones. No saben usar su poder, no saben agradecer el poder otorgado por los votos de sus ciudadanos. No saben.
En vez de intentar solucionar los problemas que se les plantean con antelación, prefieren no hacer nada hasta que el asunto sea lo bastante grave. Ejemplo de ello, el que se nos plantea en el texto: el incendio de Seseña que hasta que no se ha incendiado el vertedero, no han decidido mover ni un dedo para poner solución. Al parecer, no les importa que sus ciudadanos vayan con mascarillas por no poder respirar al estar el aire contaminado, no les importa que muchos de ellos acaben con problemas cardio-respiratorios. De lo contrario, habrían decidido reciclar esos neumáticos. Pero, ¿por qué no lo han hecho? Porque carecen de plan para reciclarlas, porque desean cubrir su dinero y gastarlo en lo que a ellos le parezca más satisfactorio como en rotondas, hoteles y más tonterías innecesarias; en vez de invertirlo en cosas necesarias y satisfactorias para los ciudadanos.
El autor en la oración “La acción de la justicia y la agilidad de las autoridades casi siempre afectan a los pequeños comercios y a las familias desahuciadas, pero no saben lidiar con empresarios tercos ni equipos de abogados mañosos” nos pretende comunicar que la “justicia” afecta a las clases más bajas y pequeños comercios, puesto que éstos no les interesa económicamente. Como no les interesa, no les importa cerrar sus negocios y desahuciar al que no paga. Mientras tanto, alagan más a los “peces gordos” debido a que les proporcionan mayores beneficios.
Fabiola Romero 2º. BACH. B
(PARTE 2)
No nos damos cuenta la mayoría de que en las elecciones van de héroes prometiendo cosas que no van a cumplir, porque al fin y al cabo son todos iguales, nos hipnotizan con sus promesas y al final acabamos cayendo en el anzuelo y de nuevo se dan los problemas. Esto viene a convertirse en algo cíclico.
Todos debemos poner solución a esta radicalidad. Tanto los problemas medioambientales como no medioambientales se tienen que prevenir con antelación para que no se produzca la catástrofe, es decir, debemos llevar una mejor gestión en general. Si prometemos cosas que luego no las vamos a cumplir, que no se haga promesa. Si verdaderamente queremos el bien de la nación, no debemos caer en la tentación del poder y demostrarle al mundo que tenemos madera de líder.
A pesar de todo, pienso que la situación de crisis y catástrofe se va a seguir dando a lo largo de la vida. Pues, no existe ese héroe que puede salvarnos de cualquier problema, el héroe que vive por el bien de los ciudadanos, el héroe que puede ayudarnos a alcanzar el Estado de bienestar, el héroe que se interesa por nosotros y nos motiva a seguir adelante. Pienso que ese héroe, será siempre el ficticio que vive en nuestra imaginación, y en nuestros cómics de Marvel y DC.
Publicar un comentario